El compartimiento del motor es una de las áreas más olvidadas durante la limpieza automotriz. Sin embargo, mantener esta zona limpia no solo mejora la presentación del vehículo, sino que también facilita inspecciones, ayuda a prevenir el desgaste prematuro y transmite una imagen de cuidado total.
Pero… ¿cómo limpiar el motor sin dañar componentes delicados o comprometer la seguridad? Aquí te lo explicamos paso a paso.
Usar productos inadecuados o aplicar agua a presión sin precaución puede afectar sensores, conectores eléctricos y componentes electrónicos. Por eso, una limpieza de motor debe realizarse con técnica y los productos correctos.
1. Espera que el motor esté frío
Jamás realices la limpieza con el motor caliente. Además del riesgo de quemaduras, el contraste térmico puede dañar algunas piezas.
2. Protege componentes sensibles
Cubre la batería, el alternador, las bobinas y cualquier conector expuesto con bolsas plásticas o film protector. La prevención es clave.
3. Aplica un desengrasante profesional
Utiliza un producto específico para motores, preferiblemente biodegradable y de pH equilibrado. Aplícalo con un pulverizador en las zonas más sucias.
4. Deja actuar el producto
Espera entre 3 a 5 minutos para que el desengrasante actúe, pero no dejes que se seque sobre la superficie.
5. Cepilla donde sea necesario
Usa un pincel o brocha de cerdas suaves para aflojar la suciedad más adherida, especialmente en zonas con grasa acumulada.
6. Enjuaga con precaución
Utiliza agua a baja presión o paños húmedos para retirar el producto. Evita mojar componentes eléctricos directamente.
7. Seca completamente
Usa aire comprimido o un paño de microfibra para eliminar la humedad. Esto es fundamental para prevenir fallos eléctricos.
8. Finaliza con un acondicionador de plásticos
Puedes aplicar un producto protector en las piezas plásticas y de goma para devolverles el brillo y prevenir el envejecimiento.
Limpia el motor una vez cada 3 a 6 meses, dependiendo del uso del vehículo. Si conduces en zonas con mucho polvo o barro, la frecuencia puede aumentar.
Utiliza productos desarrollados específicamente para estética automotriz. Marcas especializadas ofrecen soluciones que limpian sin dañar y dejan un acabado impecable.
Un motor limpio habla por ti. No se trata solo de estética, sino de cuidado, seguridad y profesionalismo.